Casi no podíamos abrir los ojos entre el aire y la bruma del mar, pero llevo conmigo un sabueso y es que a Egoitz no se le escapa ni uno, allí estaba a unos 5 metros de la orilla, preparamos todo y Egoitz enseguida cuerpo a tierra y a reptar.
Decir que estas fotos están echas con mi nuevo móvil el Sony Xperia z1.
Y aquí os dejo algunas de las 200 fotos que nos llevamos a casa.
De repente el chorlito se agacha y mira de reojo al cielo apenas nos presta atención a nosotros que le teníamos a escasos dos metros como si supiese que eramos inofensivos, sin embargo a mucha altura uno de los mayores depredadores el halcón peregrino que en este caso al vernos no lanzo su ataque contra el indefenso chorlito.
Hoy nos hemos vuelto a ir y con peor tiempo y peor mar allí seguía.
Por ultimo os dejo el vídeo que hice con el móvil ayer a la tarde.
Hola Iñaki,
ResponderEliminardesde luego que lo tuviste muy pero que muy cerca. Así la calidad que nos muestras, son una maravilla de imágenes. Espero que lo de la cámara de Egoitz no fuese nada.
Un fuerte abrazo amigo
Iñaki bien aprovechado el momento y muy buen trabajo y que gozada tener al bicho tan cerca, un saludo desde Zumaia.
ResponderEliminarEstupenda entrada Iñaki, como le puse a Egoitz me dáis envidia.
ResponderEliminarUn saludo
Buenas fotos y muy buena pareja, padre-hijo. De este paxarín tengo muy pero que muy buenos recuerdos en la playa de Bañugues-Asturias. Me alegro que disfrutarais. Un saludo desde Asturias.
ResponderEliminarwouu que cerc y fotones
ResponderEliminarsaludos
muy muy buenos!!menudo movil jeje
ResponderEliminarsaludos